¿Cuáles son las ventajas de un radiador de aceite?
Una de las principales ventajas de los radiadores de aceite es que el aceite retiene el calor, y por eso ellos siguen calentando el aire incluso después de que se apagan, proporcionando un mayor nivel de confort y una mayor comodidad de calefacción durante períodos prolongados de tiempo. Además, pueden instalarse de forma sencilla en la habitación, y son extremadamente seguros gracias a su protección contra el sobrecalentamiento. Es cierto que el funcionamiento continuo puede conllevar un mayor consumo, pero la eficiencia puede aumentarse significativamente prestando atención al aislamiento de la habitación y adecuando correctamente la potencia del radiador al tamaño de las habitaciones que se van a calentar. De esta manera, se puede mantener el consumo bajo control.